Lucas, encañonado por el sicario de Castresana al que estaba interrogando, es obligado a abandonar la comisaría ante la impotencia de sus compañeros. Les acompaña Mariano, que ha intentado hacerse el héroe. Se trata de un plan organizado por el subinspector para que el matón le conduzca hasta la guarida de Castresana. Allí espera encontrarse con Paco, al que cree responsable de la muerte de su padre.
Silvia, la CSI de la comisaría de San Antonio, está embarazada. Al principio, sólo se lo cuenta a Don Lorenzo, mientras busca el momento adecuado para hablar con Montoya, el padre de la criatura. Aunque la noticia es recibida por Silvia con mucha ilusión, se podría crear una situación difícil, pues Montoya acaba de iniciar una relación con Ruth, la ex de Don Lorenzo.