Kike y Curtis están convencidos de que Rita no está embarazada, pero Povedilla se niega a aceptar la idea de que su novia le haya mentido para casarse con él. Sus amigos intentarán demostrarle que llevan razón haciendo una prueba de embarazo a Rita sin que ella se entere. Por otra parte, las cosas en la pareja no marchan demasiado bien. Mientras Rita acelera los preparativos de la boda e insiste para que Povedilla cuente a sus padres lo del embarazo, el policía becario parece querer retrasar al máximo los acontecimientos.
Mariano y Bernarda son atracados mientras él la enseñaba a conducir. El policía prefiriere actuar con calma aún cuando el delincuente amenaza la vida de su novia. Al final el atracador escapa y ambos salen ilesos, pero Mariano se convence de que se ha comportado como un cobarde. Decidido a demostrar que puede ser un valiente, Mariano se ofrece por error para desempeñar una arriesgada misión: permanecer en la misma celda que un asesino psicópata para sonsacarle información.